NADAL TRITURA A SU JOVENCíSIMO RIVAL Y TENDRá UNA REVANCHA CON MUCHO MORBO

Rafa Nadal vivió el regreso soñado en el Masters 1000 ATP Mutua Madrid Open. No por la victoria en sí misma, sino porque únicamente debió invertir una hora (63 minutos) en el Estadio Manolo Santana. Una bendición cuando es sólo su tercer torneo de la temporada, el sexto partido, cuando se halla en un proceso de ir aumentando paulatinamente cargas de trabajo.

Sin las precauciones del Trofeo Conde de Godó, donde el temor a que se resintiera el abdominal en el saque condicionó mucho su nivel, dando otro pequeño paso adelante, habrá la esperada revancha contra el australiano Alex de Miñaur, el sábado.

Un duelo que tiene el morbo de comparar directamente dónde se halla Rafa Nadal diez días después de perder por 5-7 y 1-6 ante el 'alicantino', 25 años y nº 11 mundial. Una oportunidad de oro para que él mismo pruebe cómo avanza su empeño de llegar a Roland Garros en modo competitivo.

A sus 37 años dio una lección a un joven debutante de 16 años, el estadounidense Darwin Blanch. Rafa Nadal, sin piedad porque cuando tiene una misión no sabe de relajaciones o dejar de pisar al rival. Implacable desde el respeto. Trituró a su oponente, 6-1 y 6-0. 

Veintiún años de diferencia, una leyenda contra un proyecto de figura que acaba de comenzar en profesionales. Había perdido en Miami contra el checo Tomas Machac, su primer partido de ATP Tour, sufrió en la Caja Mágica la pelota única en esta superficie del rey de la tierra. Saliendo de lesiones, pero con veteranía y clase que no tienen fecha de caducidad. 

"Blanch tiene un gran recorrido por delante. Aún le falta continuidad. Yo he estado correcto, y feliz  de poder jugar un partido más", significó ante los aficionados, incluida su familia y el pequeño Rafael Nadal, testigo sentado en las piernas de su madre, Mery Perelló.

Cruce con De Miñaur. "La semana pasada no pudo ser, en esta va a ser muy difícil. Es una oportunidad para jugar. Estamos casi de regalo, feliz de salir a la pista otra vez más, con la ilusión de hacerlo lo mejor posible. Es complicado, De Miñaur está jugando a un nivel muy alto y aquí la bola le correrá aún un poco más por la altura. Yo seguiré mi camino, a seguir mejorando en la medida que se pueda en todos los sentidos. Para mí es una oportunidad", significó el pentacampeón del torneo.

No está para despistes, se mostró sólido, castigó a un oponente que no conoce su bola pesada, cargada de efectos y que brinca al menor contacto don el suelo. Una pelota que ha hecho daño a muchas generaciones, también al joven chaval de 1.90 metros, con un saque y una derecha que prometen mucho, que se está formando en la academia de Juan Carlos Ferrero, en Villena, donde acabó dando el salto Carlos Alcaraz, con quien ha entrenado con frecuencia.

Nadal quería ganar, sí, pero sobre todo minimizar riesgos. La salud, por encima de todo. Fue un pleno para el ahora 512 del mundo, que suma 1.294 partidos (1.072-222), por los dos de su oponente, que entró en el cuadro con una invitació del propietario del evento, la multinacional IMG. 

Una jornada redonda para Rafa Nadal, que este viernes tendrá la ocasión de preparar su duelo con Alex de Miñaur, el día en que debutará el bicampeón actual, Carlos Alcaraz, contra el kazajo Alexander Shevchenko, no antes de las 4 de la tarde. 

2024-04-25T17:11:09Z dg43tfdfdgfd