TRIUNFO HEROICO DE RUBLEV, NUEVO CAMPEóN DE MADRID SUCEDIENDO A ALCARAZ

Con fiebre, enfermo, pero con la convicción de que era un buen momento para dar un giro a su carrera. Descalificado meses atrás en Dubai, en uno de esos ataques de ira que le han caracterizado en pista y que han sido sus peores rivales no pocas veces, arrastrando cuatro derrotas consecutivas.

En el momento más delicado, además arrastrando desde el principio problemas físicos, el ruso Andrey Rublev se soltó y consiguió uno de sus triunfos más importantes. Con dedicatoria especial al staff médico del evento, a quien agradeció que con su ayuda había podido seguir compitiendo. "Acababa casi muerto todos los días. No dormía por la noche. Los últimos 3 o 4 días apenas dormí. Los médicos del torneo son increíbles, son magos”, sentenció.

Es el nuevo campeón del Masters 1000 ATP Mutua Madrid Open tras ganar al canadiense Felix Auger-Aliassime 4-6, 7-5 y 7-5 en 2h.47'. Empezó como noqueado, ausente, mareado, pero el pupilo de los españoles Fernando Vicente y Beto Martín se sobrepuso a todo para ser el digno sucesor en el palmarés de Carlos Alcaraz, a quien había destronado superándole en la ronda de cuartos.

Una doble falta de Auger-Aliassime, 23 años y nº 35, sentenció el triunfo de Rublev, 26 años y nº 8, que levanta su decimosexto trofeo en ATP Tour, el sexto en tierra y segundo Masters 1000 después de Montecarlo 2023.

Rublev, como Iga Swiatek el día anterior en la final femenina, se dejó caer sobre la arcilla del Estadio Manolo Santana de la Caja Mágica. Con el techo cerrado por lluvia.

Después de una extraña edición, plagada de incidencias por lesiones, se temió por otro desenlace traumático. Auger-Aliassime, que se había beneficiado de las retiradas de Jakub Mensik, Jannik Sinner y Jiri Lehecka, se adelantó 4-1 y 40-0 ante un oponente  que sólo en ese instante empezó a carburar. 

Rublev levantó ese 40-0, logró el break e hizo un parcial de 3-0. No le sirvió para salvar la manga, pero sí permitió que entrase definitivamente en la final, que acabó desequilibrando a su favor a base de consistencia.

Puso contra las cuerdas a Auger-Aliassime con sus potentes tiros de fondo. Quien aspiraba a ser el primer canadiense campeón de un Masters 1000 fue agarrándose a su saque, salvando 8 de 11 bolas de break. Sobrevivió con su calidad, que le llevara en 2022 al nº 6 mundial, pero necesitó masajes en los muslos. 

Fue al límite el discípulo de Frederic Fontang y Toni Nadal, y de tanto ir a remolque acabó llegando la doble falta que supuso su derrota.

Rublev, campeón y un talón de 936.225 euros. A tenor de las palabras de su técnico Fernando Vicente, no habrá celebración. "Mañana tenemos que ir al hospital para que se haga unas analíticas", aseguró a los micrófonos de TDP.  

2024-05-05T20:05:43Z dg43tfdfdgfd