Están lesionados el español Carlos Alcaraz (antebrazo derecho), el italiano Jannik Sinner (cadera) y el ruso Daniil Medvedev (cadera). Los tres perseguidores del número uno mundial Novak Djokovic, que decidió no acudir a Madrid, donde el murciano se resintió de su dolencia y el transalpino y el moscovita acabaron retirándose.
Alcaraz y Sinner anunciaron su renuncia al Masters 1000 ATP de Roma, evento que visitó este domingo el nuevo ídolo local de la raqueta, campeón de la Copa Davis y Open de Australia.
Allí saltaron las alarmas. Roland Garros está demasiado cerca, del 26 de mayo al 9 de junio, y no hay mucho margen para la recuperación física. Sinner avisó que no es segura su presencia en París, que lo intentará pero que no arriesgará más de la cuenta.
"Jugaré Roland Garros sólo si estoy al cien por cien. Si hay la más mínima duda, lo tendremos que pensar", señaló en el Foro Itálico.
En Madrid disputó dos encuentros, pese a que relató sus molestias en la cadera derecha, que se agravaron. Más de lo que imaginaba. "No quiero entrar en detalles. Pensábamos que no era, entre comillas, grave, pero la resonancia magnética mostró que algo andaba mal con certeza", detalló.
Tiene 22 años, mira también a medio y largo plazo. "Creo que la situación está bajo control. Una cosa es segura: si no estoy curado al cien por cien, me tomaré otro descanso, porque no quiero perder tres años de mi carrera", aseguró.
Sí tiene claro que, si puede y acepta jugar, "mi preparación para París no será óptima, aunque lo daré todo para estar en condiciones", manifestó. Irá valorando su estado según se acerque la cita.
Le quedará otra oportunidad en Roland Garros más adelante, en unos Juegos Olímpicos de París que le hacen especial ilusión.