UN AFICIONADO SUFRE UN INFARTO EN LA GRADA Y EXPULSAN AL JUGADOR QUE RECLAMABA ATENCIóN MéDICA: "HAY QUE SER EMPáTICO Y PONERSE EN LA PIEL DEL áRBITRO"

Momentos de tensión pusieron el cierre al encuentro de este último sábado en El Sardinero entre Racing de Santander y Elche CF. La incertidumbre en la grada, donde un aficionado necesitó de asistencia médica, alertó a gran parte del estadio y llegó incluso a los protagonistas en el campo. A pie de césped tuvo lugar una situación rocambolesca, y es que el recién sustituido Íñigo Sainz-Maza, capitán racingista, pagó con una expulsión sus peticiones para alentar al cuerpo arbitral a detener el juego. En su lugar, González Esteban, árbitro principal, decidió expulsarle por ello -como recogió en su acta- y el encuentro continuó sin interrupción hasta el pitido final.

Muchas preguntas surgieron entonces, sobre todo en relación con el protocolo de actuación en estos casos. Informó en 'Carrusel Deportivo' Óscar García que la persona afectada ya se encuentra "estabilizada" en el hospital y nuevas informaciones procedentes del cuerpo médico del Racing de Santander: "Había tenido dos paradas cardíacas en la grada". También afirmó que, entre el público, "casi todo el mundo estaba pitando, silbando y pidiendo que se parase el partido enérgicamente". "Íñigo sale de la zona técnica y le estaba hablando al informador de LaLiga, le sacan la roja y sigue el partido", ratificó.

Asimismo, el acta arbitral recogió los motivos de la polémica decisión: "Por levantarse del banquillo y salir del área técnica reclamando al cuarto árbitro que se parase el partido insistentemente por un incidente médico en la grada".

A ello se sumó la incomprensión desde el vestuario local, que pese a ganar 3-1 protagonizó un hecho difícil de explicar. Así lo reflejó su entrenador, José Alberto, en la rueda de prensa posterior: "Había una indisposición de un aficionado en nuestra grada. Íñigo es un jugador de aquí, que tiene amigos en la grada, que tiene familiares en la grada, y evidentemente se estaba preocupando por esta situación. Hay un protocolo de actuación de si la situación estaba controlada o no, pero para nosotros no estaba controlada. El nerviosismo del momento ha hecho que el arbitro tomase esa decisión, pero no tiene mucho sentido", sentenció en el postpartido.

Le tomó el testigo al técnico la mesa de 'Carrusel Deportivo', con Dani Garrido a la cabeza, para entender los motivos de la expulsión y ahondar en un problema pendiente de resolver en el fútbol español: "No hay un protocolo que obligue al colegiado a parar un partido cuando ocurre algo en la grada".

¿Cómo hubiese actuado Iturralde González?

En esta línea, el exárbitro Iturralde González confirmó también que, en el lugar de González Esteban, lo que hubiese hecho era "seguir con el partido", escudándose en que el informador de LaLiga presente en El Sardinero alegó que la situación estaba bajo control. "El árbitro no sabe lo que está pasando en las gradas. Hay una persona que está sufriendo un infarto, ya le están atendiendo y el delegado de partido le dice al árbitro que está todo controlado y que continúe... pues el árbitro ya no es Dios y continúa".

"¿Que chirría a la opinión publica? Claro que chirría, porque es una acción dura. La gente no entiende lo que está pasando, que el juego continúe, y es normal tambien. Igual hay que establecer unos mecanismos y unos protocolos y decir 'vamos a continuar con el partido porque esta persona esta siendo atendida'. El árbitro no es Dios cargamos todo en la espalda del árbitro. Suena mal que siga el partido y que haya un expulsado, pero hay que ser empático y ponerse en la piel del árbitro, porque la persona que está controlando las gradas le dice que está todo controlado.

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