La Real va a seguir reforzando su plantilla en las próximas semanas, con la calma de haber apuntalado el puesto más desguarnecido hasta ahora con el fichaje de Sergio Gómez. La venta de Le Normand se da por hecha, pero la Real confía en sacar una cantidad más elevada de los 30 millones de euros que trasladan desde Madrid y quiere esperar a dar el OK hasta que se dé otra circunstancia de mercado. En Anoeta siguen soportando la presión del Atlético de Madrid y de los agentes del futbolista, que lo querían tener cerrado hace un mes.
La previsión es fichar a un futbolista de banda y efectivamente Borja Mayoral es una opción para la delantera que se estudia independientemente de lo que suceda con Sadiq Umar . En la Real insisten en que hay muchas opciones de que el nigeriano se quede, pese a su mala temporada, sus reiterados fallos de cara a puerta y esa reunión con Olabe en la que le trasladó su malestar.
En el caso de Merino, hay incógnitas sobre cuál va a ser su desenlace, pero en la Real hay un convencimiento absoluto de que el Atlético de Madrid no será su destino. Como es lógico, en la unidad de reclutamiento hay alternativas preparadas para todos los puestos del equipo, pero sobre todo para aquellas posiciones sensibles de poder sufrir una baja desde ahora hasta el 31 de agosto. En Anoeta, no obstante, se alberga el temor, como el pasado año o incluso un poco más, en que se vean abocados a tener que traspasar a uno de los pilares a finales de agosto, con un menor margen de maniobra.