Rüdiger fue protagonista del triunfo del Real Madrid ante el Bayern Munich que le dio el pase a los blancos a la final de la Champions League. El alemán celebró por todo lo alto en el césped esa victoria e incluso se fue a por una silla para dársela a Alaba y que repitiera su famosa escena de hace dos temporadas.
Rüdiger dejó muchas imágenes sobre el césped y una de las más curiosas fue la carrera, con su peculiar forma de correr, para celebrar con sus compañeros el pase a la final.
No acabaron ahí las celebraciones virales de Rüdiger. El alemán no dudó en pararse con su coche a la salida del Bernabéu y festejar con el buen número de aficionados que estaban fuera. No se quedó ahí y también lo hizo después, pitando y saludando a los aficionados con los que se cruzaba en su coche.