La falta de VAR en la Nations League femenina ha provocado el enojo de muchas internacionales suecas ayer, después del decisivo penalti pitado a pocos segundo del final a favor de España y que dejó a las locales sin dos puntos decisivos. Suecia cree que lo justo hubiera sido que hubiera habido revisión del VAR. Pero tuvieron que resignarse con la decisión de la colegiada Rebecca Welch, que tuvo claro el agarrón de Ilested sobre Sarriegi en el área.
Kosovare Asllani aprovechó la ocasión para criticar la falta de igualdad entre el fútbol masculino y el femenino, a la vez que pide cambios en las federaciones de todas las selecciones nacionales. "Esta es la realidad en la que vivimos. Estas son todas las batallas que debemos librar todo el tiempo. ¿No puede la gente simplemente hacer su trabajo o es necesario que todas hagamos huelga para que se tome la decisión correcta? Estoy tan cansada de esto...".
"Es como si fuera necesaria una huelga para que se tomen decisiones correctas. No hay personas sabias en los niveles superiores que puedan tomar decisiones sensatas. En el fútbol hay tanta desigualdad que te frustras una y otra vez. Has abandonado toda tu carrera y tienes que seguir librando estas batallas. Quieres un fútbol igualitario y está muy lejos de serlo. No entiendo cuál es el problema", dice.
Y va más allá: "Me gustaría limpiar todas las asociaciones, tanto en la FIFA como en la UEFA. Sería divertido. ¿Podemos comprobar cuántas mujeres hay en puestos de liderazgo? No muchas y debe haber un cambio. ¿Deben todas las selecciones nacionales ir a la huelga para que tengamos un fútbol igualitario?", se sigue preguntando. "Estamos hablando de España todo el rato pero, ¿cuántas mujeres hay en la federación sueca?".
Magdalena Eriksson, autora de un gol ayer y otra de las referentes del equipo, secundó las quejas de su compañera: "Es muy duro. Probablemente no sean muchos los lugares de trabajo donde se violen de esta manera los derechos fundamentales a diario. Hay tantas naciones que están pasando por momentos difíciles y luchando contra sus federaciones... No terminaremos hasta que cada una de ellas trate a todos sus jugadoras con respeto. La lucha continúa, pero es agotadora".
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